Desde el 21 de abril, Argelia autoriza la entrada de ovino vivo español para cubrir la alta demanda durante la tradicional celebración de los países musulmanes (Eid al-Adha).
- COAG celebra la apertura porque la exportación coincide con la crisis de ventas en Marruecos y puede ser clave para miles de pequeñas y medianas explotaciones de ovino.
- Desde 2008 han cerrado más de 10.000 explotaciones de ovino en España. La ausencia de mecanismos de regulación de mercado en la UE, la caída del consumo interno y los bajos precios pagados por la industria obligan a ganaderos y ganaderas a buscar oportunidades fuera de nuestras fronteras.
La Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) celebra la apertura del mercado argelino al cordero español. El pasado 21 de abril se abrió la posibilidad para España de exportar ovinos vivos para su sacrificio en Argelia. De momento, el acuerdo que abre esta posibilidad, fruto de intensas negociaciones entre las autoridades españolas y argelinas, se limita a animales destinados a sacrificio entre 6 y 24 meses de edad enviados en barcos de ganado autorizados para su transporte en condiciones de adecuado bienestar animal.
Esta autorización llega en un momento en el que el sector ovino español atravesaba una gran incertidumbre debida a la brusca caída de las exportaciones de ovino vivo a Marruecos registrada en marzo de 2025. Así, si en 2023 nuestros envíos de animales vivos a Marruecos ascendieron a 349.428 cabezas, en 2024 aumentaron a 794.585 (el 51% de nuestras exportaciones en vivo ese año) y, sólo entre enero y febrero de 2025, se situaron en 162.275 corderos (cifras muy superiores a las de los mismos meses del año anterior). Sin embargo, datos preliminares del Ministerio de Agricultura apuntaban hace unos días a un frenazo en los envíos en el mes de marzo, no se sabe aún si ocasionado por el final del Ramadán, nuestros precios de exportación o la reciente invitación oficial del rey de Marruecos a no celebrar este año la fiesta de Eid Al Adha con el sacrificio ritual de un cordero.
La Fiesta del Sacrificio, o Eid al-Adha, es una de las celebraciones más importantes del calendario islámico, que tiene también especial relevancia en Argelia. Conmemora el acto de fe del profeta Ibrahim/Abraham, quien estuvo dispuesto a sacrificar a su hijo en obediencia a Allah/Dios. En su lugar, Allah/Dios le permitió ofrecer un carnero, y desde entonces, los musulmanes reproducen este gesto como símbolo de devoción y entrega espiritual. Durante esta festividad, las familias sacrifican un cordero siguiendo el rito islámico halal, que se realiza a mano y exige un procedimiento compasivo y respetuoso, incluyendo la invocación del nombre de Allah Dios y la orientación del animal hacia La Meca.
El sacrificio no es sólo un acto ritual, sino también un gesto de solidaridad: la carne se distribuye en tres partes, una para entre la familia, otra para los allegados y los más necesitados. En Argelia, la celebración se vive en comunidad, con oraciones, reuniones familiares, comidas tradicionales y una fuerte presencia en los mercados de ganado. Es un momento en el que se refuerzan los lazos sociales y espirituales, recordando que lo que llega a Allah/Dios no es la carne ni la sangre del animal, sino la intención y la piedad de quien ofrece el sacrificio. (Sigue en pág 2).
“Nuestro sector ganadero de ovino lleva años buscándose la vida para tratar de mantener sus explotaciones a flote en un contexto de bajada del consumo y bajos precios pagados por la industria. Es entendible que, si en otros países aprecian nuestro producto y nos lo pagan mejor que aquí, mostremos interés por atender esa demanda”, ha manifestado Antonio Punzano, responsable de sector ovino de carne de COAG. “El sector estaría encantado de vender aquí sus corderos, pero, desde 2008 han cerrado más de 10.000 explotaciones en nuestro país y no podemos permitirnos más abandonos. Celebramos, por tanto, la apertura del mercado argelino en este momento en el que tanta falta nos hacía”.
Argelia empezó a interesarse en 2024 por la carne de cordero europea. De hecho, el año pasado fue el destino del 11% de las exportaciones de la industria cárnica de cordero española, situándose como su tercer destino en importancia por volumen. Ahora se abre la posibilidad de enviar corderos vivos, algo que mejora notablemente los precios percibidos por los productores y sus posibilidades de continuar con su actividad.
“Cuando no existen medidas de regulación de los mercados y todo se fía al libre comercio, es lógico que un sector que arrastraba años de crisis trate de aprovechar mercados que posibiliten su rentabilidad”, ha apuntado Ángeles Santos, responsable de la Ejecutiva de COAG. “Desde COAG trabajamos para que, a nivel europeo, vuelva a apostarse por una reterritorialización de la producción y el consumo, pero no a costa de la desaparición de las pequeñas y medianas ganaderías de ovino por el camino”.